De acentos y tildes

La tilde diacrítica 

Sirve para diferenciar palabras idénticas con significados diferentes. Es decir, las palabras se escriben de la misma forma pero pertenecen a distintas categorías gramaticales.

Miremos algunos casos:

• Aun. Sin tilde diacrítica, funciona como adverbio (equivale a también, hasta, inclusive o siquiera) o locución conjuntiva. Ejemplos: para el primer caso "aun los socialistas lo votaron", para el segundo caso "aun cuando".

• Aún.  Con tilde diacrítica, funciona como adverbio de tiempo y es sustituible con todavía. Ejemplo: "No ha llegado aún". 

• De. Sin tilde diacrítica, funciona como preposición. Ejemplo: "Una pelota de fútbol". 

• Dé. Con tilde diacrítica, proviene del verbo dar. Ejemplo: "Dé las gracias al señor".  

• Mas. Sin tilde diacrítica, funciona como conjunción adversativa. Ejemplo: "Quiso hacerlo, mas fue imposible".

• Más. Con tilde diacrítica, funciona como adverbio de cantidad. Ejemplo: "Cuanto más, mejor".    

• Te. Sin tilde diacrítica, funciona como pronombre personal. Ejemplo: "Te lo doy mañana". 

• Té. Con tilde diacrítica, funciona como sustantivo. Refiere a la infusión o bebida. Ejemplo: "A las cinco tomamos el té con leche". 

• Si. Sin tilde diacrítica, funciona como conjunción condicional o como sustantivo (nota musical). Ejemplos: "Si está lindo, viajamos a Salta", "Compondremos en Si bemol".  

• Sí. Con tilde diacrítica, funciona como adverbio de afirmación o pronombre personal reflexivo. Ejemplos: "Sí quiero", "Solo habla de sí mismo".